Come Saludable, reduce el estrés!
Tips para sacarle provecho al tiempo que dedicas a tu alimentación
Cuando los padres se acercan a mí para comenzar un régimen de alimentación saludable familiar, una de las primeras preguntas que hacen es:¿Cuánto tiempo tengo que dedicarle? “Nuestra vida es muy movida, entre el trabajo y las actividades de los niños, no nos damos a basto”. ¿Te suena familiar?
Si bien es cierto que la vida moderna está llena de productos y servicios que están diseñados para hacernos la vida más cómoda, no podemos perder de vista el hecho de que con la industrialización de los alimentos han aumentado de manera alarmante los índices de obesidad en niños y adolescentes, haciéndose pandémicas en estas poblaciones vulnerables la diabetes, el asma y otras enfermedades crónicas. Ahorramos tiempo en la cocina pero pasamos más tiempo en médicos y hospitales.
Como padres, queremos ofrecer a nuestros pequeños las mejores oportunidades: el mejor colegio posible, ropas acordes con las exigencias de la actividad o la temporada y cursos o clubs que los hagan competitivos social e intelectualmente… y en esa búsqueda incansable nos la pasamos en el coche, nos volvemos el valet, mayordomo y chofer de nuestros hijos… pues es natural que pensemos que no tenemos tiempo para nada más.
¿Me creerías si te cuento que hacer una comida en tu casa te puede tomar el mismo tiempo que tardas manejando, esperando en línea y poniendo tu orden en cualquier restaurante de comida rápida? Si te organizas, te garantizo que lo puedes lograr ofrecerte a ti y a tu familia una alimentación que los mantendrá sanos y adicionalmente les brindará energía para realizar con mucho entusiasmo y energía todas sus tareas.
El primer paso es el calendario con menús, programa qué quieres comer y cuándo, así ahorras no solo tiempo sino también dinero, además si complementas esta herramienta con la lista de compras, puedes incluso reducir el tiempo que pasas en el super, porque no tendrás que devolverte de una zona a otra o regresar al establecimiento a buscar ese artículo que se te olvidó.
Una vez que tienes tu mercado hecho, procesa lo más que puedas antes de guardar en el refri: lava y seca bien las frutas y vegetales antes de almacenarlos, pela, pica y guarda en porciones, en envases limpios y con tapa, los vegetales y frutas que lo necesiten: sandía, melón, mango, cebollas, ajo, apio, zanahorias, etc. Por ejemplo, puedes tener en la nevera un frasco de vidrio con sofrito en aceite de oliva, o cubitos de hielo hechos con aceite de oliva y hierbas variadas en el congelador.
Con el menú en mano junta todas las recetas que requieran de horno, de esta forma ahorras tiempo y electricidad o gas, mete al horno juntas las cosas que lleven el mismo tiempo tiempo.
Gracias a Estefanía Lima de marcha FM por semana a semana abrirme las puertas de tu programa para apoyar el mensaje de @mamabuscabienestar a través de mis consejos prácticos y probados para papás y mamás comprometidos con buena nutrición y bienestar de sus pequeños