Tips para combinar los alimentos y mejorar tu digestión

Siempre que prepares una comida o merienda, ten en cuenta el aporte nutricional que te ofrece, no cuentes calorías, cuenta sabor, color y macronutrientes. Un plato balanceado debe ser colorido.

Recuerda que idealmente, el 45% de tu plato debe ser carbohidratos complejos,  con alto aporte de fibra, a menos de que sufras de una condición crónica para la cual la fibra esté contraindicada; aproximadamente el 20% de tu plato debe ser grasas (La grasa saturada del aceite de coco entra en esta categoría pero todas las demás grasas saturadas y trans deben ser evitadas al máximo). 35% de tu plato debe ser proteína animal magra o vegetal.

La manera cómo combinas tus alimentos va a afectar directamente la forma como tu cuerpo va a digerirlos y cómo tus células van a tener acceso a sus nutrientes, por eso se recomienda combinar:

  • Vegetales harinosos (o poco harinosos) + vegetales sin fécula + proteínas

  • Vegetales poco harinosos o sin féculas + granos o leguminosas

  • Vegetales poco harinosos o sin féculas + grasas + fermentos (comidas fermentadas)

  • Vegetales de toda índole + grasas

  • Vegetales + frutas

  • Frutas dulces + Frutas sub acídicas

  • Frutas Sub acídicas + Frutas acídicas

Combinar proteínas con grasas o frutas en una elección contraproducente ya que la digestión se hace pesada y se crea un ambiente ácido en el sistema digestivo que favorece la inflamación, esto sucede especialmente con las proteínas animales combinadas con cítricos.

Combinar alimentos ricos en calcio con alimentos ricos en vitamina C ayuda a que la biodisponibilidad de estos nutrientes sea mayor, por lo cual son aprovechados más eficientemente.

Los alimentos provenientes de la familia de los melones deben consumirse solos.

No diluyas tus jugos gástricos a la hora de comer, no consumas bebidas con tus comidas.

Estas recomendaciones son por comida, no sumando todas las comidas del día.

Ejemplos de tipos de alimentos:

  • Proteínas: Aguacates, aceitunas, semillas, nueces, productos lácteos, carnes y derivados, semillas, coco y soya.

  • Grasas: Aceites, mantequillas, manteca y cremas lácteas.

  • Carbohidratos: (vegetales altos en fécula, harinosos) Granos, arroz, cereales, panes, pasta, papa, batata, auyama, ocumo, yuca, trigo y squash.

  • Vegetales poco harinosos: Alcachofa, remolacha, zanahoria, coliflor, maíz y petit pois.

  • Vegetales sin fécula: Espárrago, brócoli, coles de Bruselas, Col rizada, hojas de remolacha, ajo, célery, cebollín, ajo porro, perejil, célery, repollo, espinacas, germinados, calabacín, arúgula, berro, lechuga, espinaca, pimentón, tomate…

  • Frutas Dulces: Banana, dátiles, higo, uvas, ciruelas pasas, pasitas, fruta deshidratada y lechoza.

  • Frutas ácidicas: Limón, lima, blackberry, raspberry, grapefruit, naranja, piña, fresa, ciruela ácida y granada

  • Frutas sub-acídicas: Manzanas, duraznos, blueberries, cereza, kiwi, mango,  pera y ciruela dulce.

  • Melones: Cantaluope, Honeydew, watermelon, persian y crenshaw

THAIS NAVEDA LUY1 Comment